El sector logístico se prepara para afrontar los importantes cambios que el Código Aduanero de la Unión Europea (CAU) va a introducir a partir de mayo de 2019. Terminales portuarias operando como almacenes de depósito temporal (ADT) y una total reconversión a la documentación electrónica son dos de sus apuestas más ambiciosas.
Qué es el CAU
El Código Aduanero de la Unión Europea define el marco legal para las reglas y procedimientos aduaneros en el territorio de la UE. Entró en vigor en mayo de 2016 reemplazando y adaptando reglamentos previos del marco europeo para cumplir con los requisitos del Tratado de Lisboa. Aún se encuentra en fase de transición hasta llegar a la implementación completa prevista inicialmente para 2020.
Al ser un código relativamente joven, va en consonancia con las necesidades actuales del comercio y tiene la simplicidad, la funcionalidad y la agilidad como sus objetivos clave. De lo que se trata pues es de proveer un reglamento para facilitar el comercio y hacerlo más fluido, promoviendo también el uso de la tecnología.
Novedades del CAU para las terminales portuarias
Las terminales portuarias son una pieza de vital importancia en cualquier transporte de mercancías. Por ello, todo cambio de regulación puede alterar las reglas del juego y hay que estar muy atento a sus implicaciones. El cambio introducido por el CAU nos deja dos novedades muy importantes: por un lado, la obligatoriedad para todas las terminales de poder actuar como ADT (Almacén de Depósito Temporal); por otro, una esperada transición hacia la documentación electrónica.
Terminales portuarias como Almacén de Depósito Temporal (ADT)
Esta novedad prevista en el CAU está llamada a terminar con uno de los aspectos más ambiguos en materia de terminales portuarias, redefiniendo las responsabilidades de éstas. A partir de mayo de 2019, toda terminal que pertenezca a la UE deberá tener autorización para operar como Almacén de Depósito Temporal. Esto conlleva a que las terminales cumplan una serie de requisitos, gestiones y obligaciones, acabando de paso con el actual limbo existente en esta materia.
Pese a que la obligatoriedad llegará en mayo, las terminales portuarias dispondrán de un periodo de transición de aproximadamente 6 meses, aunque los detalles aún están por especificar.
Ahora bien, ¿qué implica este rol ADT que las terminales portuarias deben adoptar? Principalmente, que las mercancías procedentes del transporte nacional e internacional (de países europeos y del resto) podrán permanecer en las terminales portuarias durante un periodo de 90 días. Una vez excedidos esos 3 meses, la terminal portuaria deberá comunicarlo a la Aduana e iniciar el expediente de abandono.
Este nuevo papel como ADT implica que las terminales serán responsables a efectos aduaneros y tributarios de autorizar la salida de cualquier mercancía que se encuentre en sus instalaciones, así como del control de esa mercancía y su custodia, reportando a la autoridad aduanera cualquier problema o irregularidad.
En resumen, las terminales portuarias verán crecer su importancia y su autonomía, adquiriendo nuevas responsabilidades y garantizando el almacenaje y vigilancia de las mercancías que permanezcan en sus instalaciones acogiéndose al régimen ADT.
Transición hacia la documentación electrónica
Otro de los principales objetivos de la CAU es la adopción de una documentación aduanera digitalizada y armonizada. Esto supone que todo el intercambio de información entre autoridades aduaneras y empresas sea electrónico.
Sin embargo, es un proyecto ambicioso y requiere un esfuerzo, especialmente tecnológico. La principal razón de que se encuentre aún en estado transicional es que los sistemas informáticos necesarios no están aún plenamente operativos. El periodo de transición debería finalizar el 31 de diciembre de 2020, pero la Comisión Europea ha propuesto extenderlo a 2025 para asegurar que cada trámite aduanero pueda ser efectivamente formalizado de manera electrónica.